Coquetería elegante y juguetona: una mezcla irresistible
Te ha pasado que una dama te clava los ojos, luego sonríe ligeramente, cambia de dirección la mirada, y luego te observa con interés? ¿Acaso te está lanzando señales sin que te des cuenta? Pues bien, bienvenido al misterioso y emocionante laberinto donde el juego de miradas puede ser confuso. En ocasiones tiene sentido, y otras es un enigma,